Si esta claro que para dominar el mundo debo tener un dado de 20 caras, también debo tener un decálogo, porque un plan sin su decálogo es como una tarta de manzana sin manzana ( o sin tarta, los 2 ejemplos valen).
1. Tener ganas de dominar el mundo. Obviamente hacerlo porque “si” no es una razón suficiente para hacer nada, así pues nos llenaremos de ganas o nos tumbaremos hasta que se nos pase la tontería.
2. Organizar un ejercito de poder insuperable: Lo ideal es siempre no optar por reclutar humanos, son torpes y se creen que piensan. Reclutar pequeños mamíferos (véase lémures, cerdiformes, ornitorrincos y/o/u suricatas) y a Chuck Norris para que lo comande y al Doctor House para echarnos unas risas (no confundirse, ninguno de estos dos son humanos).
3. Jugar a menudo a juegos tipo Medal of Honor o Call of duty. No porque enseñen estrategia militar ni nada por el estilo, sino porque te pones mu violento después de jugar.
4. Encontrar una base secreta. No buscar isla con volcanes, crean una mala cobertura para Internet, y sin Internet no se puede gobernar nada (ni la republica independiente de tu casa). Lo ideal es un bunker en una metrópolis, al mas puro estilo Kingpin.
5. Ordenadores, muchos ordenadores. Con una conexión de banda ancha para que mis lémures y yo nos podamos viciar a juegos en red mientras Chuck y House se encargan del trabajo sucio.
6. Matar con anterioridad a todos los superhéroes existentes. No se empezara ninguna conquista mundial hasta que todo héroe este muerto, exceptuando aquel que sea mi alterego, a este no solo se le dejara con vida, sino que le dejaremos pistas de mi plan.
7. Crear un estatuto del futuro imperio. Esta cosas tardan mucho en hacerse y aprobarse, así pues lo tendremos ya hecho para no perder tiempo, y por cierto, pondremos lo que nos salga de las pelotas , si queremos llamarle nación, le llamaremos nación al imperio, de hecho le llamare república democrática de Squallia y será una dictadura (o squalltadura).
8. Comprar un medio de comunicación, a poder ser de televisión. Los villanos que tienen una canal de televisión son mas carismáticos (véase Berlusconi), además, así podríamos ver constantemente los Simspson, House, Friends y Lost, un capitulo detrás de otro (si, ya lo se, me comprare la Fox).
9. No rebelare mis planes a nadie (excepto a mi secuaces y mi alterego). Nadie...nadie!!! debe saber mis planes para conquistar el mundo, que consistirá en “mudarse a Madagascar y soplarle al presidente de USA que todos los países tienen armas de destrucción masiva (y si no funciona decirle que le han llamado maricón) hasta que los haya destruido a todos, una vez haya terminado, mandar a mi ejercito a la Casa blanca vestidos de albañiles y pintarla de rosa, La vergüenza será tal que los estadounidenses migraran a la Antartida, y yo podré gobernar el mundo”. Si alguien descubriese mi plan habría que matarlo, a no ser que sufriera amnesia espontánea y no se acordara de nada.
10. Consultarlo con mi mujer. Deberé consultar que le parece a mi mujer todo este plan, sino esta de acuerdo abortarlo, porque lo último que quiero es tenerla enfadada, que uno quiere conquistar el mundo, pero ante todo es un calzonzazos (licenciado).
Por cierto,...Si enfrentáramos a McGuiver, el equipo A y el tío de Bricomania, en ver quien haría antes la Sagrada familia, ¿quién ganaría?...¿por qué no se le ocurrió esto a Gaudí?...¿Gaudí era más de ArtAttack?....¿Y porque esa obsesión de Félix Rodríguez de la Fuente por el lirón careto?...
